INFORME  Y  DEMANDA CONTRA 46 ESTADOS

1º INFORME DE FUTUROS VIVIBLES

ALIMENTOS DE DESTRUCCIÓN MASIVA

CÓMO EXPLOTAR ANIMALES NOS LLEVA A LA EXTINCIÓN

DIETA VEGETAL COMO EMERGENCIA GLOBAL

CREANDO UN MARCO INTEGRADO DE ACCIÓN

Contacto: jaimedelval [@] metabody.eu

Informe completo en inglés – actualizado en diciembre 2023:

>>>1st-LIVEABLE-FUTURES-REPORT__Updated-version-1.1—Dec-2023

Ver Peer Review del informe:   Fernández-Mateo, J. 2024. “Quot”;. [Review of “1st Liveable Futures Report: Food of Mass Destruction: How Exploiting Animals Drives Us to Extinction”] Journal of Posthumanism, vol. 4, no. 1, Apr. 2024, pp. 33-38, doi:10.33182/joph.v4i1.3246. https://journals.tplondon.com/jp/article/view/3246

English web here.

Resumen de 10 puntos clave en dos páginas:

>>> 10 PUNTOS CLAVE__PDF

Resumen para medios en español en 14 páginas (y ver más abajo):

>>>INFORME ALIMENTOS DESTRUCCION MASIVA__RESUMEN MEDIOS__PDF

APÉNDICES, AMPLIACIONES Y ACTUALIZACIONES:

Nuevo Estudio: LOS OCÉANOS SE SALVAN EN TU PLATO. Pesca, acuicultura y destrucción masiva.

https://metabody.eu/es/los-oceanos-se-salvan-en-tu-plato/

Nuevo Estudio: LOS INCENDIOS SE APAGAN EN TU PLATO. Ganadería y deforestación amazónica.

https://metabody.eu/es/los-incendios-se-apagan-en-tu-plato/ 

Nuevo Estudio: POR QUÉ NO ES DEFENDIBLE LA GANDERÍA EXTENSIVA

https://metabody.eu/es/por-que-no-es-defendible-la-ganaderia-extensiva/

Nuevo Estudio: LA VERDAD DEL CONSUMO

https://metabody.eu/es/la-verdad-del-consumo/

Comunicados de Rebeldes Indignadas sobre el LOBBY GANADERO en los Movimientos Ecosociales

https://metabody.eu/es/golpe-estado-lobby-ganadero-rebelion-cientifica-espana/

https://metabody.eu/es/caza-brujas-tapar-lobby-ganadero/

Comunicado: El TEDH da un Portazo al Futuro

https://metabody.eu/es/el-tedh-da-un-portazo-al-futuro/

 

Reels del informe en FV:

https://www.instagram.com/reel/C5G-amWIFET/https://twitter.com/FuturoVegetal/status/1773791423709479111

FORMACIÓN de 1 hora sobre el informe ALIMENTOS DE DESTRUCCIÓN MASIVA

El informe “Alimentos de destrucción masiva” sintetiza por primera vez más de 120 estudios internacionales del más alto perfil de las últimas décadas que demuestran con absoluta contundencia que la IAEA (Industria Alimentaria de Explotación Animal) es la más devastadora de las industrias humanas, por delante de los combustibles fósiles, y que es el factor central de la crisis ecosocial, y base histórica de las desigualdades humanas tanto como de la crisis ecológica, principal fuente de cambio climático, extinciones masivas, contaminación global, agotamiento de agua, problemas de salud y desigualdad humana, inseguridad alimentaria y conflicto, y abuso extremo de animales.

Dichos estudios afirman que la crisis ecológica plantea una amenaza inmediata al derecho a la vida: una amenaza de extinción conocida y silenciada desde hace cinco décadas. Afirman que la transición global a dietas vegetales es la medida más urgente. Esta iría seguida del decrecimiento profundo en todos las otras áreas de consumos y producción, única manera efectiva de reducir los combustibles fósiles. Por último, para un futuro vivible y una verdadera sostenibilidad del sistema tierra que no se base en parches provisionales, es preciso reducir la ocupación humana de la tierra, incluido el decrecimiento demográfico, que se debería facilitar informando, a fin de que ocurra voluntariamente, con un cambio profundo en las formas de vida, deshaciendo el retroceso que ha supuesto para la biosfera la expansión humana desde el Neolítico y en resonancia con teorías antropológicas como “La Sociedad Próspera Original”, sobre la mejor calidad de vida de sociedades de recolector*s, frente al fracaso y suicidio colectivo la era agrícola-industrial-digital: la era de la explotación de la vida, el supremacismo humano, el antropocentrismo, el heteropatriarcado,  el colonialismo y la Sexta Gran Extinción Masiva.

De los 120 informes citados, más de 60 cuantifican la necesidad urgente de una transición hacia dietas vegetales  (tanto como sea posible tan rápido como sea posible, reduciendo productos animales al menos un 50% global, que implica un 84% para España) como respuesta fundamental a la crisis, seguida de un decrecimiento radical en todos los consumos, y el decrecimiento demográfico voluntario, otro tabú que no se puede soslayar. Pero lejos de transicionar y decrecer dichas industrias alimentarias y de hiperconsumo tienen previsto duplicarse al tiempo que todo decrecimiento demográfico se ve como un problema. Los subsidios a la ganadería, los combustibles fósiles y la familia numerosa no paran de crecer en una suerte de psicosis planetaria. Los estados silencian el problema y alimentan la crisis, cometiendo crímenes de lesa humanidad, por lo que están siendo enjuiciados ante el tribunal de Estrasburgo.

El informe sintetiza 120 informes de las últimas décadas que cubren la práctica totalidad de aspectos de este inconmensurable problema, corrigiendo sesgos e integrándolos desde aproximaciones filosóficas, antropológicas y multidisciplinares que ofrecen una nueva visión de conjunto, empujando a nuevos horizontes los diagnósticos, pronósticos y respuestas posibles a esta crisis epocal sin precedentes.

El informe es parte de las inciativas Futuros Vivibles y Holocausto Planetario, es publicado por las organizaciones Reverso e Instituto Metabody, desarrollado y dirigido por Jaime/Jaym* del Val, filósof* y activista, conocid* en el ecologismo entre otras cosas por promover hace 18 años la paralización del hotel del Algarrobico en los tribunales desde la asociación Salvemos Mojácar, y la investigación está asociada a un proyecto europeo de cultura coordinado por Reverso y Del Val, así como al movimiento VegAnarQueer.

Presentación:

Ver también conferencia de Jaym* del Val “Holocausto Planetario, Supremacismo Humano y Extinción: un Juicio a la Humanidad”:

Videos de otras 20 conferencias de Jaym* del Val sobre el tema:

https://metabody.eu/trash-human/

Proyectos relacionados:

www.holocausto-planetario.org – www.liveablefuture.org – www.veganarqueer.net

–  https://metabody.eu/es/extincion-performance/

Prensa sobre el informe:

 

EL INFORME EXPONE LA MÚLTIPLE FARSA DE LA COP28
  • El principal problema de la crisis climática y de biodiversidad no son los combustibles fósiles sino LA ALIMENTACIÓN DE ORIGEN ANIMAL, de la que ni siquiera se habla
  • La principal solución a los combustibles fósiles no son las renovables sino el DECRECIMIENTO RADICAL DE LOS CONSUMOS, de lo que tampoco se habla.

Por primera vez en una COP hay  un día dedicado a la alimentación, el 10 de diciembre pero si se ve su programa se observa que la cuestión de transición a dietas vegetales es casi inexistente en los debates, con solo tres mesas que hablan de proteína alternativa.

Se propone una triple farsa: triplicar renovables, medidas de mitigación por absorción de carbono y subvenciones para problemas del cambio climático; pero no la reducción de combustibles fósiles y ni se menciona el problema de la industria alimentaria como motor principal de la crisis climático-ecológica, y la urgencia de un decrecimiento económico y el freno al aumento demográfico, que son los TRES temas fundamentales que se deberian estar debatiendo.

Por otro lado ni siquiera los movimientos ecologistas en sus protestas están demandando de forma significativa, y en la mayoría de casos ni siquiera mencionando, ninguna de esas tres cuestiones fundamentales y tabú. Un silencio aun mayor en los medios de comunicación y las políticas gubernamentales.

El tema que sí se debate, la reducción de combustibles fósiles, es bloqueado por estados como China, India, Rusia o Arabia, pero además la UE y USA tienen posturas falsas al apostar por una reducción ya que su estabilización de emisiones depende de las deslocalización de industrias en países como China e India.

Los estados de la OPEP bloquean incluso los más tibios acuerdos, y la siguiente cumbre se prevé en otro petroestado, Azerbayán, que,  tras las cumbres de Dubai y Egipto, será la tercera en un país no solo favorable al petróleo y negacionista de la crisis climático-ecológica sino represor de derechos fundamentales y de posibles protestas. Es inaceptable que la ONU permita esta deriva criminal y suicida.

 

RESUMEN PARA MEDIOS

Un INFORME recoge los resultados de más de 100 estudios internacionales de las últimas dos décadas que plantean la industria alimentaria de productos animales como la más destructiva de la tierra, mucho más que los combustibles fósiles, informes que urgen a un cambio de dieta basada en plantas como medida esencial para evitar una catástrofe climática.

La ganadería, y en general la Industria Alimentaria de Explotación Animal:

  1. genera más gases de efecto invernadero que el transporte mundial,
  2. es la mayor fuente de extinciones en masa, pérdidas de ecosistemas, deforestación, polución y zonas muertas en los océanos,
  3. es la mayor fuente de enfermedades humanas: solo el consumo de carnes rojas crea más muertes que los accidentes de tráfico, 1 millón al año en el mundo, y 11,5 millones las dietas insanas, casi el doble que el tabaco; es también la mayor fuente de pandemias y de resistencia antimicrobiana,
  4. es la mayor fuente de agotamiento y contaminación del agua, de inseguridad alimentaria y desigualdad, al dedicarse la mayor parte de suelos terrestres a alimentar ganado para los países ricos,
  5. es un holocausto de 80.000 millones de animales brutalmente explotados al año, diez veces más en acuicultura, tres cuartas partes en granjas industriales en condiciones de sufrimiento, confinamiento insalubre, mutilaciones y explotación extrema de animales considerados seres sintientes por la ciencia, la filosofía y la ley, pero oculto todo ello por el secretismo y desinformación de la industria y los estados.

Por ello, tras 5 décadas de inacción de los estados, que conocen pero silencian esta cuestión, y que incluso en relación con los combustibles fósiles cometen grave inacción, promoviendo en su lugar un crecimiento económico incompatible con un futuro vivible, como se viene denunciando desde 1972, se ha iniciado una DEMANDA ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos contra los 46 estados del Convenio Europeo de Derechos Humanos por crímenes de lesa humanidad y por violación de derechos fundamentales al promover la industria más destructiva de la tierra y esconder sus efectos nocivos: la industria alimentaria de explotación animal.

Exigen la eliminación inmediata de todo subsidio a ganadería, agricultura animal, acuicultura y pesca, que vulneran la Convención del Clima de Naciones Unidas, el Protocolo de Kyoto y el Acuerdo de París, el fin de aquí a 2030 de las industrias alimentarias de explotación animal, y que se subsidie a ganaderos, agricultores y pescadores el paso a industrias vegetales y la liberación de suelos para reforestación restaurando la naturaleza y creando reservas para absorber carbono que serian el 68% de soluciones necesarias para evitar un infierno climático y un colapso eco-social durante este siglo.

El problema no es solo la carne: los productos lácteos, huevos, pescado y marisco tienen también efectos devastadores en todos los aspectos.

Como muestra el informe publicado por las organizaciones Reverso y Metabody, como parte de la iniciativa FUTUROS VIVIBLES – titulado “ALIMENTOS DE DESTRUCCIÓN MASIVA” la comunidad científica internacional y las instituciones tienen consenso abrumador sobre que la industria alimentaria de explotación animal es la principal fuente de la crisis planetaria que actualmente plantea una amenaza existencial inminente para la humanidad, especialmente, aunque no solo, por la aceleración del cambio climático.

Más de 100 estudios, incluidos varios de la ONU, coinciden en que el cambio global inmediato hacia una dieta basada en plantas, sobre todo en países ricos, sería la medida más urgente, eficaz, inevitable e imperiosa si queremos evitar una catástrofe climática. Mientras, la ONU lleva años lanzando la alarma de que solo tenemos hasta 2030 para tomar medidas drásticas y transformaciones sistémicas profundas si queremos evitar un escenario catastrófico e irreversible.

Pero los gobiernos del mundo, lejos de atajar el problema subvencionan masivamente las industrias cárnicas y de explotación animal, al tiempo que esconden sus devastadores efectos, cometiendo con ello presuntos crímenes de lesa humanidad y violaciones de los derechos humanos y fundamentales, sobre todo el derecho a la vida. Dichos crímenes de lesa humanidad son fehacientes ya, habida cuenta los datos aportados sobre los daños ya actuales con millones de muertes humanas al año, y añadiéndose el hecho de que la inacción actual y durante las últimas 5 décadas, conociéndose las amenazas, daños y riesgos inminentes, implican crímenes aun mucho mayores de cara a las próximas décadas, crímenes por los que se deberá juzgar a los estados, sobre todo si no se adoptan medidas de inmediato. 

LOS DATOS RESUMIDOS DEL PROBLEMA

  1. CAMBIO CLIMÁTICO: El ganado y la Industria Alimentaria de Explotación Animal (IAEA) son una de las mayores fuentes del cambio climático, generan más emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) que todo el transporte mundial, con un 20% del total y 8Gt/año, y son con diferencia la mayor fuente de destrucción de reservas de absorción de carbono por deforestación y zonas muertas de los océanos y que destruyen zonas de bosques y oceános que representan el 68% de medidas necesarias para afrontar el cambio climático (ver punto siguiente), las llamadas soluciones basadas en la naturaleza (Nature based solutions o NBS) para absorber carbono.
  2. EXTINCIONES MASIVAS Y DESTRUCCIÓN DEL ECOSISTEMA TERRESTRE: La ganadería es el principal impulsor de las extinciones masivas, la pérdida de ecosistemas y la deforestación mundial, con un millón de especies amenazadas o extinguidas, pues utiliza el 80 % de la agricultura mundial y un tercio de la superficie terrestre (como África y Brasil juntos) para alimentar ganado. El 41% de la deforestacion tropical es para alimentar ganado, 2,1 millones de has por año, 85% de ello en la Amazonía donde cada año se deforesta una superficie equivalente a la mitad de Holanda para alimentar ganado, a 15 árboles por hamburguesa. Gran parte de la soja para ganado, o de la carne, importadas de Latinoamerica a Europa (esta última aun permitida por las leyes europeas que supuestamente iban a prohibir importaciones asociadas a deforestación), es fruto directo de la deforestación de la Amazónia.
  3. La ganadería es el principal impulsor de la contaminación mundial pues la agricultura para alimentar el ganado utiliza aprox. el 80% de los fertilizantes mundiales, causa principal de las 700 zonas muertas de los océanos  debido a la contaminación por fertilizantes y purines.
  4. La ganadería consume la mitad de la producción mundial de pescado y es el principal impulsor de la sobrepesca, la destrucción de ecosistemas marinos y extinciones masivas en los océanos y del exceso de acuicultura, esta última en sí misma también muy problemática para el medioambiente, los animales y la salud humana, y siendo la pesca en sí misma principal fuente de extinciones y destrucción de ecosistemas marinos.
  5. SALUD: La explotación de animales y su explotación asociada de ecosistemas es la fuente de casi todas las pandemias de la historia y de casi todas las enfermedades zoonóticas, que representan el 75 % de todas las enfermedades humanas y el 80 % del uso de antibióticos y, por lo tanto, de la resistencia antimicrobiana que se espera cause 10 millones de muertes al año en 2050.
  6. La dieta insana con exceso de productos animales y sodio y carencia de vegetales y frutas es responsable 11,5 millones de muertes por año, equivalente a casi el doble de muertes por tabaco y al doble de todos los muertos por COVID-19, como tener 2 ataques del 11S al dia o un avión Jumbo 747 cayendo cada hora, pero sin noticia alguna en los medios; 2 millones de muertes son atribuibles a carne y lácteos, 1 millón a carnes rojas solo, con más muertes por comer carne que por accidentes de coche; las dietas insanas son la principal fuente de enfermedades no transmisibles y muertes humanas prematuras a través de enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes, obesidad y muchas otras enfermedades, con cientos de millones de humanos bajo tratamiento médico crónico, sin mencionar las intoxicaciones alimentarias y otros efectos de los químicos masivos que se dan a los animales en las granjas y de sus enfermedades debidas su terrible estado de vida, hacinamiento y sufrimiento; de modo que mientras la ganadería mundial y sus cultivos causan desnutrición en los países pobres, provoca una epidemia de obesidad, diabetes, cáncer e infartos en los países ricos.
  7. AGUA, SEGURIDAD ALIMENTARIA, DESIGUALDAD Y CONFLICTO: La agricultura animal utiliza cerca del 70% del agua dulce global y es el principal impulsor del agotamiento y contaminación global del agua, fuente primordial de inseguridad alimentaria e hídrica ahora y mucho más de aquí a 2050 donde se prevé que se duplique el consumo de carne, imposible pues ya hoy transgredimos 7 de 8 fronteras de habitabilidad terrestre y consumimos el equivalente a 1,7 planetas.
  8. La agricultura animal es una de las mayores fuentes de la desigualdad humana, la desnutrición, la pobreza, la migración y el conflicto en un escenario de desertificación, donde los cultivos para el ganado, para el consumo de carne en los países más ricos, son cultivados en los pobres, donde las poblaciones no tienen acceso a ellos; millones de las personas que trabajan en esta industria están bajo explotación y esclavitud, mientras que los pueblos indígenas son asesinados o expropiados para deforestar la Amazonía para alimentar al ganado. Todo ello es además la principal causa de conflictos, desplazados, y guerras actuales e inminentes por recursos, hambrunas y falta de agua, y es un es un elemento catalizador de otras tensiones políticas.
  9. HOLOCAUSTO ANIMAL: La IAEA es la fuente absolutamente principal de maltrato animal sistémico,  representa aprox. el 99% de los animales sometidos a crueldad y esclavitud, con 80 mil millones de animales explotados, mutilados y sacrificados por año en tierra, y diez veces más en acuicultura y pesca, en conjunto estimado en más de 40 billones en los últimos 100 años, 100 billones incluida la pesca, especialmente en los países más ricos y con mayor porcentaje de agricultura industrial (en USA el 99%, en España el 80%), siendo las granjas industriales incompatibles con el bienestar animal y fuentes de sufrimiento extremo, por el confinamiento, hacinamiento y explotación de animales que son considerados seres sintientes por la ciencia, la filosofía y la ley, tratados masivamente con antibióticos y docenas de químicos tóxicos por sus terribles condiciones de estrés y hacinamiento, siendo sometidos a mutilaciones sistemáticas sin anestesia, representando todo ello además una grave amenaza para la salud pública, realidad que está inaceptablemente protegida por el secretismo, la ley y los gobiernos, asegurando la complicidad de las poblaciones, siendo todo ello un atentado contra los derechos humanos y siendo el bienestar animal una cuestión fundamental de derechos humanos, igual que el medioambiente sano ha sido ya reconocido por la ONU como cuestión esencial de derechos humanos y del derecho a la vida.
  10. En resumen, para alimentar a 80 mil millones de animales en maltrato sistémico (diez veces más en acuicultura), que constituyen solo el 18% de calorías de la dieta global y que son la mayor fuente de pandemias y de resistancia antimicrobiana, se destruye el ecosistema terrestre y se promueve la desigualdad humana, y comiendo el producto de esos animales maltratados se desatan la mayoría de problemas de salud humana. Esto es así desde el surgimiento histórico de la explotación animal en el Neolítico, pero multiplicándose de forma exponencial en el S. XX con la ganadería, pesca y agricultura industriales, y la superpoblación que estas generaron, en un bucle totalmente insostenible, como se viene reconociendo desde hace cinco décadas. No obstante lo cual se espera que el aumento de carne se duplique hasta 2050 al aumentar su consumo los países en desarrollo, algo absolutamente incompatible con la seguridad alimentaria y con un futuro vivible en la tierra.

Diagrama de cifras del Holocausto Planetario, Jaime del Val, 2023:

Historia de un silencio genocida, ecocida y zoocida

El problema se conoce desde los años 1960 y 70 y los gobiernos de la comunidad internacional llevan 50 años de de retraso en abordar esta cuestión, que fue silenciada por activistas climáticos en el pasado (como Al Gore). Pero desde 2006 (año del célebre informe de FAO sobre ganadería) hay un alud de informes científicos e institucionales sobre el tema tabú, y cada vez más voces se unen a denunciarlo, como Greta Thunberg, o incluso Bill Gates que recientemente afirmaba que los países ricos deben pasar urgentemente a carne 100% vegetal o sintética, y Yuval Noah Harari, él mismo vegano, afirmaba ya en 2015 que la ganadería industrial es “el peor crimen de la historia”. Mientras, crecen voces activistas centradas en el problema, como George Monbiot en el Reino Unido, la campaña Rebootfood del movimiento internacional Replanet, o Futuro Vegetal es España. Dos décadas de películas, y seis décadas de libros reveladores (ver listas de libros y películas al final de las referencias del informe), así como un centenar de informes, de la ONU, comisiones gubernamentales y científicas (ver lista completa de referencias del informe), aportan una prueba abrumadora del problema, y sin embargo aun no se ha conseguido que haya concienciación social, ni voluntad política.

Haciendo un poco de historia: El libro Primavera Silenciosa de Rachel Carson de 1962 que se reconoce como lanzamiento de la conciencia ambiental ya versaba sobre los devastadores efectos de pesticidas en la industria alimentaria. Desde 1971 (Lappé 1971) hay libros que exponen la urgencia de pasar a dietas vegetales, justo antes de que se iniciaran las cumbres climáticas en Estocolmo en 1972, y de que el informe para el Club de Roma (Meadows et al 1972) denunciara ese mismo año que la economía de crecimiento es un suicidio colectivo. En 1992, a la par que se iniciaba la Convención de Naciones Unidas del Clima y se realizaba la cumbre de Rio’92, la comunidad científica internacional lanzaba la primera de una serie de “Advertencias a la Humanidad” (Kendall et al 1992) sobre la crisis existencial inminente y la necesidad de cambios profundos e inmediatos. En 2005 entraba en funcionamiento el protocolo de Kyoto. En 2006 se publicaba el informe de FAO sobre el impacto del ganado (Steinfeld et al 2006), multiplicándose desde entonces los estudios sobre el tema. En 2009 Johan Rockström junto a otros científicos creaban en concepto de Limites Planetarios (Rockström et al 2009) que definen las condiciones de habitabilidad para la civilización humana, asociadas al inusual equilibrio climático del Holoceno. En 2015, a la par que el Acuerdo de Paris, se inauguraba el concepto de Salud Planetaria desde la comisión del mismo nombre (Whitmee et al 2015). En 2017 se retomaban las advertencias de la comunidad científica a la humanidad (Ripple et al 2017) esta vez firmadas por más de 15.000 científicos, repetidas en años posteriores (Ripple et al 2020, Crist et al 2022). En 2019 se lanzaba el concepto de “dieta de salud planetaria” (Willett et al 2019), al tiempo que los informes del IPCC confirmaban que solo queda hasta 2030 para evitar el desastre con medidas drásticas, y el IPBES (2019) y el GBO (2020) confirmaba que hay un millón de especies amenazadas y un 50% de ecosistemas gravemente degradados, mientras UNEP (EGR 2020) denunciaba que se deberían multiplicar esfuerzos por 5 para evitar una catástrofe climática. En 2023 el informe de la comisión de la Tierra (Rockström et al 2023) confirmaba que ya se han sobrepasado 7 de 8 límites planetarios,  mientras numerosos informes abundan en que la crisis climática y de biodiversidad se está acelerando mucho más de lo esperado (Ripple et al 2023, IPCC 2022 y 2023) con multitud de efectos en cascada y “tipping points” o inflexiones irreversibles no esperadas. Pero las emisiones de combustibles fósiles no paran de crecer, y del problema alimentario ni se habla en la política y los medios de comunicación.

BENEFICIOS CUANTIFICADOS DEL PASO GLOBAL A UNA DIETA VEGETAL

Según los informes analizados, el paso global a una dieta vegetal, sobre todo en países ricos, implicaría:

  1. EMERGENCIA CLIMÁTICA
  • Eliminación rápida del 20% (8 Gigatoneladas) de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) – equivalente a eliminar la totalidad del transporte mundial, o de la energía en edificios, o de la industria manufacturera.
  • Liberación de un tercio de la superficie terrestre, 3.000 a 3.700 millones de hectáreas de tierra (como África y Brasil juntos) para reforestación y regeneración como sumideros de carbono que se estima que proporcionarán entre el 66% y el 68% de las medidas de mitigación necesarias + regeneración de zonas oceánicas muertas como sumideros de carbono
  • ninguna otra medida puede tener efectos tan grandes y rápidos – única opción para evitar la catástrofe y no exceder 1,5º, después de 5 décadas de inacción
  1. BIODIVERSIDAD Y REGENERACIÓN DE ECOSISTEMAS
  • Liberación de un tercio de la superficie terrestre, 3.000 a 3.700 millones de hectáreas de tierra (como África y Brasil juntos) para reforestación y de zonas de océano muerto
  • Prevención de cerca de 1.000.000 de extinciones
  • este es el único medio para lograr las medidas propuestas para proteger más del 50 % de la tierra y el océano; de hecho, se podría lograr una protección del 75 % o más para la reconstrucción y restauración y “rewilding” o resilvestración.
  1. FIN DEL HOLOCAUSTO ANIMAL
  • Erradicación de la esclavitud de 80 mil millones de animales terrestres al año y diez veces más en acuicultura, y de su sufrimiento, mutilaciones, explotación y masacre – fin del Holocausto de 100 billones de animales explotados y exterminados en un siglo, 40 billones en granjas industriales y acuicultura – fin del crimen más grande de la historia y del problema ético más apremiante, que es la base del progreso en las sociedades democráticas ricas, pero oculto, lo que permite la complicidad de las poblaciones;
  • permitiendo por primera vez avanzar en una JUSTICIA INTERESPECIES sin la cual no hay ni salud planetaria ni salud humana, pues además de ser inaceptable en sí mismo, este Holocausto es el epicentro de la crisis: destruimos el ecosistema planetario para alimentarlo y destruimos la salud humana comiendo sus productos.
  • Una dieta vegana evitará, al año:
    • 80 mil millones de animales sacrificados en granjas terrestres, y alrededor de 800 mil millones en acuicultura, con miles de millones de animales terrestres que llegan vivos al proceso de degüello y escaldado, y cientos de miles de millones de pescados y mariscos asesinados por asfixia y parálisis por congelación o divididos y desmembrados o hervidos vivos.
    • 80 mil millones de animales en explotación y abuso de por vida en granjas terrestres, y alrededor de 800 000 millones en acuicultura, con  alrededor de 60 000 millones de ganado y aves de corral en confinamiento de por vida bajo techo en granjas industriales, en condiciones de hacinamiento, insalubres y tratados con antibióticos y numerosos productos químicos tóxicos.
    • 800 mil millones de pescados y mariscos hacinados en granjas marinas y fluviales, tratados masivamente con antibióticos y numerosos químicos tóxicos.
    • 1 a 2 billones de peces capturados en los océanos, 40% debido a captura “accidental”, y muertos por asfixia, aplastamiento y desgarro, así como destrucción masiva de ecosistemas marinos por la pesca de arrastre.
    • Varios miles de millones de animales encarcelados de por vida en jaulas del tamaño de sus cuerpos, de 300 a 700 millones solo en Europa, 90 millones en España.
    • 7 mil millones de pollitos sacrificados después del nacimiento, triturados o en cámaras de gas.
    • 8 mil millones de animales muriendo prematuramente en las granjas debido a las condiciones de vida o transporte
    • 80 a 160 mil millones de mutilaciones: de picos, rabos, genitales, orejas, alas, marcados y muchas más (considerando que la mayoría de los animales sufren más de una mutilación).
    • Decenas de millones de desollamientos, muchos de ellos realizados con el animal vivo y plenamente consciente, para la industria textil, pero en muchos casos vinculada a la de alimentación.
    • Miles de millones de inseminaciones forzadas (violaciones) de vacas, cerdas, gallinas y muchos otros animales, y miles de millones de secuestros de crías que causan un sufrimiento inmenso a vacas y terneros, cerdas y lechones y muchos otros animales con fuertes lazos madre-hijo.
  1. CONTAMINACIÓN Y DESESTABILIZACIÓN DE LOS CICLOS TERRESTRES
  • reducir 80% de la contaminación global por fertilizantes y pesticidas, y 100% de metano, óxido nitroso, amoníaco, estiércol y purines, de la agricultura
  • regeneración de las 700 zonas muertas en los océanos
  • eliminar el riesgo de extinción de abejas y polinizadores
  • eliminar las docenas de productos químicos tóxicos administrados masivamente a los animales en granjas y acuicultura,
  • reducir el 80% de los plásticos en los océanos, provenientes de la pesca,
  • y por lo tanto eliminación de la mayor parte de la contaminación del aire, suelo y agua.
  1. SALUD HUMANA – mejora masiva y eliminación de la mayoría de las amenazas
  • eliminar 8 de los 11,5 millones de muertes por año, y cientos de millones de personas bajo tratamiento crónico debido a una dieta poco saludable con exceso de productos animales y falta de productos vegetales
  • casi eliminar riesgos de futuras pandemias y enfermedades zoonóticas (75 % de las enfermedades humanas): miles de millones de muertes, y se espera que aumenten las pandemias debido al cambio climático y la creciente destrucción de los ecosistemas
  • eliminar el 80 % de la resistencia antimicrobiana que se prevé generará 10 millones de muertes por año en 2050)
  • eliminar otras amenazas debidas a intoxicaciones alimentarias, entidades químicas novedosas, cambio climático y degradación de los ecosistemas
  1. IGUALDAD HUMANA, SEGURDAD HÍDRICO-ALIMENTARIA, Y PAZ
  • reducir el 70% del agotamiento y la contaminación del agua, especialmente en países pobres y vulnerables
  • garantizar la seguridad alimentaria y del agua
  • permitir reducir el actual 30% de desperdicio total de alimentos
  • permitir la relocalización de las economías alimentarias, hacia prácticas, medios de vida y comunidades agroecológicas sostenibles
  • defender los territorios indígenas y cooperar con las comunidades indígenas para lograr un cambio sistémico
  • permitir que los países pobres vivan de su agricultura en lugar de cultivar para obtener la carne que comen los países más ricos
  • permitir cambiar a economías alimentarias más justas, asegurando una dieta vegetal saludable para todos.
  • evitar los riesgos de miles de millones de refugiados, conflictos globales y guerras debido a la escasez de agua y alimentos
  • creando solo así JUSTICIA INTERGENERACIÓN: un futuro habitable para todos.
  • creando solo así JUSTICIA INTRAGENERACIONAL E INTERSECCIONAL: equidad y no discriminación de los más vulnerables.
  1. ECONOMÍA
  • Ahorro estimado de 30 billones de dólares en costos ambientales y de salud para 2050 (Springmann 2016b)

 

EXIGENCIAS

Desde las organizaciones promotoras del informe Exigimos que se declare una EMERGENCIA GLOBAL análoga a la de la COVID-19, con coordinación internacional inmediata, y con el doble lema de Comida y Combustibles, o Transición Alimentaria y Energética:

  1. La transición alimentaria a dietas vegetales como prioridad primera:
    • 1.   Eliminando de inmediato los subsidios a la industria de explotación animal, exportaciones e importaciones, poniendo impuestos primero, y prohibición desde 2030, a productos animales y granjas, empezando por países ricos. Dichos subsidios vulneran la Convención del Cambio Climático de Naciones Unidas (UNCCC) de 1992, el Protocolo de Kyoto de 2005 y el Acuerdo de Paris de 2015.
    • 2.   Ayudando a ganaderos, pescadores y agricultores a transicionar a industrias vegetales o nuevas tecnologías emergentes (como la llamada agricultura celular, o sea carne in vitro de laboratorio, o la fermentación bacteriana).
    • 3.   Subvencionando a agricultores y ganaderos que liberen suelos, para su regeneración natural como medida esencial de absorción de carbono para mitigar el cambio climático, regenerando así el tercio de superficie terrestre que se liberaría de agricultura para el reflorecimiento de la biodiversidad.
    • 4.   Promoviendo masivas campañas informativas que empoderen a lo/a/es ciudadano/a/es para un cambio voluntario, acabando con el secretismo inaceptable y la desinformación de las industrias ganaderas y cárnicas y con el apoyo del estado a dicho secretismo y desinformación sobre los devastadores efectos de la industria para los animales, los humanos y el planeta, poniendo de relieve la multitud de beneficios que dicha transición tiene para el cambio climático, la biodiversidad, la salud e igualdad humana, y por supuesto el bienestar animal.
    • 5.   Al tiempo que se favorecen cultivos orgánicos y locales, y la recolección silvestre, y se elimina el desecho de un tercio de la comida global que se tira o pierde en la actualidad por las masivas ineficiencias del sistema alimentario globalizado, y que implica que un tercio del impacto ambiental, animal, y climático promovidos por la industria, ha sido para nada.

2. Iniciar un decrecimiento: para la necesaria, inmediata y drástica reducción de combustibles y para un cambio sistémico más profundo y duradero:

    • 6.   Reduciendo el consumo en todas la áreas (transporte, energía, hogar, construcción, manufactura, textil, extracción, así como freno en los ambientalmente insostenibles desarrollos de IA y TIC), como única medida válida para reducir emisiones de CO2, además del cambio de dieta, teniendo las energías renovables límites, y no siendo en modo alguno asumible el aumento previsto de 200-300% de consumo global, pues consumimos ya el equivalente a 1,7 planetas y el escenario actual nos llevaría a consumir 4 planetas en 2050.
    • 7.   Eliminando y prohibiendo la obsolescencia programada en todas las áreas de manufactura y producción, y más en general revirtiendo la economía de crecimiento, que desde 1972 se vienen denunciando como suicida desde el propio Club de Roma, al ser incompatible con la sostenibilidad de condiciones vivibles en la tierra.
    • 8.   Incentivando una suspensión voluntaria del aumento demográfico y abordando el problema de la superpoblación, otro tabú que urge abordar sin dilación, dejando de subvencionar las familias numerosas, promoviendo formas voluntarias y democráticas de abordar el problema, con impuestos mayores a los más ricos que tengan hijos, subvencionando la huelga de natalidad, empoderando a las mujeres, con información y educación, reconociendo el papel esencial de la diversidad sexual y de los parentescos no reproductivos, e incentivando una reproducción mínima basada en el principio de diversidad.
    • 9.   Declarando unos Derechos Universales de la Tierra y sus formas de vida, definiendo una JUSTICIA TERRESTRE al servicio de la totalidad de la vida en la biosfera, y no, como las actuales leyes, de la propiedad y explotación de una especie ecocida, y definiendo una Salud Planetaria no antropocéntrica donde los llamados “Limites Planetarios” de habitabilidad no se evalúen solo en función de la civilización humana sino de las 9 millones de especies y sus ecosistemas, pasando del concepto problemático de sostenibilidad (de la civilización humana) a uno de prosperidad para todas las formas de vida,
    • 10.   Facilitando una transformación más profunda de las formas de vida asumiendo que el elefante en la habitación somos nosotros y para que reflorezca la biodiversidad en la biosfera debemos volver a ser lo que el Sapiens fue durante el 99% de su historia: una más de las 9 millones de especies.

Sintetizando resultados de estudios se concluye que las medidas más poderosas que se pueden dar desde la esfera personal tanto como la política son, en este orden:

  1. Paso a dieta vegetal (y a partir de ahí a consumo local, estacional, autocultivado o recolectado).
  2. Reducción drástica de consumos en todos los sectores: transporte, energía y hogar, manufactura, textil, tecnología digital e informacional, electrodomésticos, inmobiliaria, eludiendo la obsolescencia programada, los plásticos, etc.
  3. Decidir no tener hijos (o máximo uno).

Todo ello acompañado de:

  1. Un retorno al cuerpo, no solo a lo local, recobrando capacidades perdidas y prácticas colectivas que nos hagan menos dependientes de insostenibles tecnologías, al tiempo que enriquecemos nuestra experiencia, alejándonos del empobrecimiento de sistemas urbanos e industriales, y alejándonos de la predominancia de abstracciones verbales, numéricas y semióticas, recobrando la importancia de formas de comunicación y pensamiento no verbales que nos conecten y pongan en pie de igualdad con todas las formas de vida, desmontando el supremacismo humano que nos lleva al abismo, con las personas de sociedades industrializadas aprendiendo de las comunidades indígenas y, en particular, de los recolectores nómadas.
  2. Activismo, resistencia, desobediencia civil, compartir prácticas y conocimientos.

 

A quienes les pudieran parecer radicales estas medidas, desde la asociación recuerdan que unas muy parecidas se han venido reclamando desde 2017 por más de 15.000 científicos de 184 países, la mayor comunidad mundial que haya firmado jamás un manifiesto (ver https://academic.oup.com/bioscience/article/67/12/1026/4605229 ).

Si se lograra incluir este asunto en la agenda global, con cinco décadas de retraso, es evidente que no será fácil y generará posiblemente aún más resistencias y conflictos que la renuncia a los combustibles fósiles, en parte por el complejo entramado global de la alimentación, y en parte por las diferencias culturales en relación con la misma. Por ello es tanto más urgente que desde Europa se asuma la responsabilidad histórica con el legado colonial e industrial, se tenga coherencia con las supuestas políticas verdes que defiende, y se haga un paso pionero e inmediato en esta dirección.

Denunciamos la total inacción del Gobierno de España ante este tema, al revés, con España como promotor número uno de nuevas granjas y consumo de carne en Europa, siendo el pais más sujeto a desertificación, con el mayor número de animales en jaulas: 90 millones. Y ello a pesar de que el informe del Ministerio de Consumo de 2022https://www.miteco.gob.es/es/ceneam/recursos/pag-web/informe-sostenibilidad-consumo-espana.aspx – propone la urgencia de reducir drásticamente el consumo de productos animales, como acertadamente propuso el entonces ministro de consumo Alberto Garzón, con la vergonzosa respuesta de la plana del gobierno saliendo a favor de la ganadería y las vergonzantes declaraciones del presidente del gobierno en televisión asegurando que  “a mí, donde me pongan un chuletón al punto, eso es imbatible”, lo que equivale a salir en defensa del tabaco, los combustibles fósiles, las armas de destrucción masiva o el Holocausto.

Denunciamos igualmente la total ausencia de políticas al respecto en una Europa que se pretende falsamente verde.

Denunciamos el gravísimo negacionismo climático de ciertos sectores políticos y sociales, que con sus peligrosas ideologías solo pisan más fuerte el acelerador a la extinción, vulnerando derechos de humanos, animales y la Tierra.

Denunciamos el ocultamiento y la desinformación promovida por las industrias ganaderas  y cárnicas, con el apoyo de los estados, tanto respecto al sufrimiento animal, como a los efectos nocivos de sus productos en la salud, como al devastador impacto ambiental, como a las profundas desigualdades humanas que la industria globalmente promueve, promoviéndose una auténtica dictadura y fanatismo carnívoros y de la explotación animal.

Denunciamos el silencio sobre este tema por parte de medios de comunicación así como de numerosas ONGs, de académicos e intelectuales, y de gran parte de la población a quienes exigen mayor compromiso, al igual que, por supuesto, a representantes políticos, cuyo silencio sobre este asunto es inadmisible y por ello se ha recurrido al Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Con todos ellos se iniciarán rondas de reuniones para trasladar el contenido del informe y la demanda, como inicio de campañas a corto, medio y largo plazo.